Desarrollo de marca Cortijo San Isidro

El diseño de la marca Cortijo San Isidro se inspira en la naturaleza, con colores y formas orgánicas que evocan la calma del campo y la tradición rural. La marca se basa en una serie de símbolos que encapsulan los valores y la esencia del lugar. Cada icono representa un concepto clave: la luna simboliza la hospitalidad y la serenidad de las noches en el cortijo; el sol, las experiencias únicas bajo la luz del campo; la hoja de olivo, la conexión con la naturaleza; la colina, la agricultura tradicional de la región; y la línea del río, el entorno natural que enmarca este espacio de tranquilidad. Estos elementos se combinan para transmitir una identidad visual sencilla y profundamente conectada con su entorno.

El diseño de la marca Cortijo San Isidro se inspira en la sencillez y la conexión profunda con la naturaleza y la vida rural. Cada trazo y cada símbolo —desde la luna hasta la hoja de olivo— reflejan los valores de hospitalidad, serenidad y autenticidad que caracterizan al cortijo. Esta identidad visual, con una paleta de colores suaves y formas orgánicas, busca transmitir una experiencia genuina de conexión con el entorno rural.

La identidad visual de Cortijo San Isidro aspira a fusionar la tradición y la modernidad. Inspirados en la naturaleza y la esencia del campo andaluz, cada símbolo de la marca refleja un aspecto de la vida rural: el sol, la luna, la agricultura y el paisaje. Este enfoque se combina con un diseño limpio y moderno que utiliza líneas simples y una paleta de colores suaves, creando una marca que honra sus raíces tradicionales mientras se proyecta hacia el futuro con un estilo contemporáneo.